jueves, 31 de enero de 2013

Buenos Aires

A punto de terminar el enero porteño, me queda lejos ya el 20 de noviembre, aquí en Buenos Aires son las 13.09 h, el sol aprieta a treinta y cuatro grados entre Sarmiento y Maipú donde dí con mis huesos hace ya doce días que se han ido como un disparo tan urgente que todavía no me ha dejado respirar el aliento de esta bella mujer que es Buenos Aires.

Realmente no sé por donde comenzar mi humilde texto para descubriros su magia, no es fácil de entender sin mirarle a la cara; roza lo invivible y lo insustituible no sólo por su verano y por el calor asfixiante que desprende su piel sino por esa dulce chulería que gusta de usar su alma, la clase que tienen sus mujeres desfilando por la calle le echa una mano para hacerla más linda pero a Baires la podría comparar con un@ artista, tiene ese "algo" que nadie sabe que es pero que la diferencia del resto, eso es lo que es para mí Buenos Aires, una artista con forma de mujer, es ese tango tan bien bailado, ese bandeoneón que canta llorando, ese Gardel con sombrero, el Charly de su locura, la 9 de Julio en su Enero, el Spinetta y su muchacha, el recuerdo de O Incio en su falda y un gallego que llora porque tiene miedo a marcharse, eso y la flaquita de Cartagena es lo que está dejando huella en mi tinta, en mi música y en "El tango feroz" de mi garganta.


Buenos Aires a 31 de enero de 2013 son as 13.47 hora porteña.